22.5.09

Cuchara

Mi llave de la casa no abre facilmente.
Cuchara, la gatita de Tona y el personaje mas importante del departamento, lo sabe.
Cada vez que llego paso más de un minuto dando vueltas a la llave y golpendo la puerta. He llegado a tocar el timbre como queriendo que alguien abra, como queriendo que Cuchara me abra.

Cuando logro abrir y entro, Cuchara está en el sillón viéndome, como pensando-que rara es, mira que la ventana está abierta y entrar por la ventana es taaan fácil-.
Mira Cuchara que no fuí exactamente yo la que se quedó fuera del departamento una noche de tormenta por no poder entrar por la ventana, una llave te hubiera servido esa noche; quizá no mi llave, pero un buen duplicado sí.

Total, he decidido instruir a Cuchara en el arte de abrir la puerta, para que ella haga algo más que corretear a mi hermana con sus hilitos y para que evite esa fingida sonrisa mía con los vecinos que suben y bajan a la tienda mientras yo sigo en la puerta girando mi llave sin éxito.

Aviso por si llegan alguna vez y en el interfon les dicen -miau-. Tranquilos, están en el lugar correcto, a no ser que quisieran ir a a otra parte y su piloto en automático los hubiera traído a gozar del amplio y cómodo departamento de Cuchara.
Aprovecharé de una vez y la instruiré también para que ahuyente a los que llegan preguntando cada viernes -¿ahí es lo de hombres por la equidad?-, o que les diga que sí, y comenzamos a lavar cerebros en pro de los gatos.
Y pensándolo mejor, también la instruiré para que tenga la respuesta adecuada para los del agua, los del cable, los de alguna iglesia proselitista, etc...

2 comentarios:

Benjamín Téllez dijo...

yo he usado tu llave dos veces y he podido abrir sin problemas...

Mariana Pato dijo...

ok, corrijo: Mi llave y yo no abrimos fácilmente la casa. El factor "yo" parece ser determinante.