18.10.15

Miradas.

Las miradas que damos a las cosas nos delatan. 
¿Qué tal vemos el arcoiris? ¿Qué tal vemos una catarina escurriéndose por el cuello de algún sujeto? ¿Qué tal vemos la nube que cubre el sol? ¿Qué tal vemos el reloj de la sala? ¿Qué tal vemos el zapato roto de un caminante? ¿Qué tal vemos los ojos del otro? ¿Qué tal vemos la mano manchada de tierra? ¿Qué tal vemos a través del cristal de una copa? ¿Qué tal vemos el mensaje en el mar y la botella? ¿Qué tal vemos a un gnomo? ¿Qué tal vemos la luna? ¿Qué tal vemos a Uxmal? ¿Qué tal vemos la risa y el llanto? ¿Qué tal vemos el final de un cerillo encendido? ¿Qué tal vemos el árbol peinado por el viento?

Recuerdo una vez que ví la cola de un gato que se mecía suavemente al borde de un tejado campirano, lo veía con ternura y con ganas de aventura. Otro día, en la catedral de Estrasburgo, ví el reloj más sofisticado que he visto, lo veía con curiosidad, con ganas de aprender y con sorpresa.
 
Y así, en verano, visité las tierras del Sacbé; en medio del sol  se encuentra la hacienda de Yaxcopoil, lugar de los álamos verdes. Es vieja, colorida, elegante.
Me desató miradas en planos, de profundidad, de historia, de detalles entrelazados, de vida y muerte, de reconstrucción. 
 


 



 Dos miradas en un mismo espacio.


Información para visitar la Hacienda.
El gato quizá ya se movió, y el reloj sigue ahí, en esa catedral.

14.10.14

Detalles del espacio y el color en Pompeya I

Me encanta leer artículos en los que se describe con detalle el espacio, el sabor, el color, la historia del lugar, las relaciones particulares con un todo; me recuerda  el estilo de "Un toque de canela", película que me fue recomendada por una linda española de nombre Elena a quien di asilo por couch-surfing y me devolvió el favor con este regalo y el descubrimiento de  un nuevo uso de la canela en la cocina.
Esos libros que inician parecido a esto:  "Estaba leyendo un libro de pasta dura y café con olor de madera antigua que le había regalado su abuelo, se lo dio un día mientras estaba cortando unas hojas para té de aquella mata de eucalipto que la parecía de ensueño; el libro le narraba  historias de los indios malayos al sur de la península Malaca; lo leía absorta, podía imaginar el brillo de cada planta y cada olor que los indios usaban para matar a sus enemigos con puntas de flechas y cerbatanas, imaginaba la selva y lo salvaje. Recordó entonces que su primer contacto con Malasia fue de niña,  de tarea debía elegir un país que iniciara con la letra de su nombre,  resultó que la M englobaba una vasta variedad de culturas desconocidas; variedad parecida a aquella de un avistamiento de aves en Nukak, norte del Amazonas; esa variedad que se desdobla infinitamente".

Me gusta eso, tender una red infinita de relaciones en las que al final la causa del relato se vuelve, posiblemente, desconocida y el sabor de leerlo es absolutamente único y genuino.  Así quisiera empezar este post, quisiera poder decir algo impregnado de espacios y colores, sin sentido, sin misura. Algo así como:

Estaba dispuesta a conocer Pompei  o Pompeya, se encontraba en medio de la estación central de tren en Nápoles, ciudad caótica que le había hecho probar ya la mejor pizza que ha comido en toda su vida. Aunque corrió, no fue lo suficiente, tuvo que esperar un segundo tren dirección Sorrento, y mientras, tuvo el tiempo de observar las pintas en los muros, el mundo sin fin de turistas, un anuncio que le decía de comer mozzarella de Nápoles o no sabría lo que es la felicidad; no lo hizo, pensó que como ya debe algunas de esas cadenas electrónicas que rompen la felicidad si no las envías, los efectos del queso podrían no contrarrestar las tantas que no ha enviado, necesitaba algo mas poderoso que un queso o, en su caso, que alguien le explicase las equivalencias al respecto.

El tren le hizo recordar por un instante el querido metro de la ciudad de México; se subieron un grupo de chicos e iniciaron a tocar algo parecido a lo que sería la tarantela napolitana. Cruzó palabras con un turista inglés, al final se desearon buen viaje, el pronunció un "adios" y un "hasta luego" como lo pronuncia aquél que está descubriendo el arte del español;  ella bajó del tren en Pompei scavi y fue directamente a comprar el boleto de ingreso.
















En medio de una gran ciudad que gira y se mueve, se encuentra este espacio inmóvil a los pies de un gigante activo. Recordaba todos los documentales, libros y revistas que había leído de esa ciudad, le giraban en la cabeza como esos instantes antes de descubrir la gran sorpresa, la verdad de esa ciudad llena de relatos míticos paralizados en la historia.


El sol saturaba de color cada una de las columnas que se asoman a la entrada. Se escuchaban algunos guías poniendo palabras a las piedras, dibujando historias de aquellas gloriosas épocas romanas.

Pompeya resultaba ser una ciudad mucho más grande de lo que la imaginación y los relatos le habían permitido pensar. Se comenzaban a ver los muros, las columnas que se alzan rígidas y viejas,  las calles perfectamente trazadas, las separaciones entre casas, las marcas humanas.






Una cosa llamó toda su atención e inmediatamente la hizo sentir el movimiento en esa ciudad, las marcas de las ruedas de carretas. El peso de la historia marcado a lo largo de cada una de las calles. El rastro del comerciante, del viajero, de aquél que podía pagarse una carreta.




Pompeya se está desvistiendo ante sus ojos.


Continuará...




Corleone

Invitada por dos amigas con las que he paseado  bastante en Sicilia, fuimos a Corleone. Nos esperaban en una casa típica del campo; con árboles frutales por doquier y un amesa plena de abundante comida recién cocinada.
La plática resulto exquisita así como ese licor hecho en casa con una mezcla de uvas y un toque de cachi siciliano. He de decir que me causa un placer extraordinario probar una fruta nueva, ese día probé dos,  cachi  y carruba.  
El caco (en singular) me recordó los sabores tropicales y frescos; aunque por fuera me parecía sólo un jitomate. La carruba es conocido como el pan de los pobres en Corleone; tiene un sabor dulce y seco, poco parecido al guamuchil.







Al finalizar este agasajo dimos un pequeño paseo por el pueblo, pequeño porque la lluvia no permitió mayor movimiento. Corleone se ha convertido en un destino turístico importante cuando se planea un viaje en Sicilia; es conocido como el pueblo de las 100 iglesias, como el de nacimiento de la mafia, el nacimiento de Vito Corleone y cuenta con múltiples atractivos:  la torre sarracena, las cascadas,  la cruz, la degustación de la comida tradicional, el bosque de Ficuzza, la gole del Drago, entre muchos otros.





¿De la Mafia?
Bueno, no soy una experta para hablar de la mafia, hay mucha información que se encuentra con facilidad  donde se aborda el origen e historia de la mafia. Evidentemente el tipo de organización social que había en Sicilia  en el siglo XIX y la unificación de Italia por allá del 1860 fue detonante para el surgimiento de la cosa nostra. Y también hubo una importante migración a América, de ahí  la historia de Vito Andolini, conocido como Vito Corleone.

 Y sí, también pregunté de la situación actual en Corleone y  escribo a continuación algo de lo que me dijeron:

"Yo pienso que la violencia que se vive en México en este momento es peor de lo que se vive aquí ahora; quizá no peor que lo que se vivía antes; alrededor de los años 50's moría al menos una persona por día en Corleone; pero no eran civiles, siempre eran personas involucradas en los tratos de la mafia; aunque obviamente  la gente del pueblo vivía con temor".

 Hoy, un guía de turistas (casi siempre de turistas que vienen de EU) me dice, "como se que vienen por la película de El Padrino esperando ver algo, pues les invento dos o tres muertos recientes, eso les gusta; pero en Corleone tiene más de 20 años que no muere ninguno y que no se tiene el nivel de violencia de aquellos tiempos".





"También sabemos que aquí siguen estando muchos mafiosos, aquí nacen y desde aquí controlan, pero aquí no hacen nada, en los últimos años algunos han querido pedir el pizzo (lo cual sería una cuota a los comerciantes); pero no han tenido éxito; aquí viven los meros jefes y no se debe hacer, se hace en Palermo o en otras partes de Sicilia".


"Y a ese que arrestaron aquí en el 2006 lo conocíamos aunque no sabíamos que estaba ahí, sí y también conocemos a las familias de algunos de ahora y los saludamos; viven aquí y sí los encontramos de frente los saludamos, ¿cómo no vamos a saludarlos si nos cruzamos en la calle?".
Aquél al que se refiere es un jefe de la mafia, Bernardo Provenzone, estuvo escondido en una casa en Corleone por más de 20 años hasta que el 11 de abril del 2006 lo arrestaron en Corleone, en una calle que se llama ahora " 11 aprile 2006. Provenzone, Capo della Mafia".


Aquí termino este breve relato de mi visita, Corleone resultó ser un pueblito encantador y sin un resquicio visible de aquello con lo que muchos lo identifican.

21.9.14

not@s sobre Poesía


Hace poco, en Stromboli, una persona usó la frase "es una poesía" para referirse al primer bocado que le dio a su pasta. No pude más que mirarla y sonreír. Decidí en ese instante que "poesía" es una palabra que me gusta y me gusta oírla inesperadamente.

Llamar poesía a lo que yo creo puede ser un instante inesperado que de algún modo te da cierta belleza, me pareció justo. Aunque he de decir que nunca había visualizado un plato de pasta como un verso, y menos como uno  cabal,  profundo, cierto. Posiblemente ese plato de pasta sí lo era.

Recordé que cuando leo una poesía hay palabras "especiales" que me generan una sensación placentera al oírlas  en un espacio donde no las espero, donde no las veo venir; por ejemplo:  llave,  baluarte, candela, azul, infinito, búho... 
No sé de dónde provenga ese placer; pero es diferente al de leer la poesía entera y sentirme saciada con la mezcla entera  y exquisita de sonidos.
Y ¿qué decir de las onomatopeyas bien utilizadas?, esas, las amo; he de confesar que me resultan orgásmicas.

Vienen a mi mente algunas poesías que me han marcado como: "Algo sobre la muerte del mayor Sabines", no puedo decir que la experiencia de escribir sobre la muerte resultase gratificante, no lo sé, lo tendría que decir aquél que lo ha hecho; pero puedo decir que al final de leer este poema, sin interrupciones, tuve una impresión gratificante; había una armonía ajena al dolor, era el retoño del ciclo de la vida;  "Arte poética", "Soy" y  "La Suma" (los tres de Borges); esta última todavía me puede generar horas de preguntas y reflexiones, pienso que tal acomodo de fonemas me resultan de verdad mi propia cara.

Recuerdo haber escrito, de chica,  poemas con palabras que rimaban, iba al diccionario, tomaba una palabra extraña y la rimaba con todo lo que se dejara creando un poema, muchas veces sin ton ni son. Vino entonces a mi, la tarea de hacer un compendio de  sonetos, (soneto es de esas palabras "especiales")  recuerdo que lo hice en una olivetti mecánica verde, tardé días enteros y leí un sin fin de sonetos, al final había entendido dos cosas:  el perfecto uso de eso que llamaban el papel borrador y que en un poema no bastaba con la rima. 

El tejido de un poema implica crear,  "poiesis". En el contexto en que uso la palabra creación, aparecen en mi memoria los haikus,  poemas que encierran una porción quizá no finita de belleza; retratan un sólo acto. No hay la perpetuidad ni la solemnidad de la historia, es sólo un instante, un momento que termina al borde de la última letra. 

"furuike ya
kawazu tobikomu
mizu no oto

el viejo estanque 
una rana ha saltado 
¡plop!"

"nozarashi o
kokoro ni kaze no
shimu mi kana

A la intemperie,
se va infiltrando el viento
hasta mi alma".

"ume ga ka ni
notto hi no deru
yama-ji kana

Aroma del ciruelo,

de repente el sol sale.
Senda del monte"



Y ¿qué decir de todos esos versos que saltan al aire en una noche de jaranas? 
Eso es poesía, el fandango, el son, un instante tras otro de creación.

"Mi vida si fueras rosa
te llevaría en el sombrero
pero como eres hermosa
en el corazón te llevo 
encarnada mariposa
hermosísimo lucero"

"...la falda de su encanto era un nido de versos que volaban al instante, sus manos mariposas que en el viento mostraron un afán de despedida, su cuerpo se quedó en el pensamiento del alma que recuerda entristecida ...."

¿Y este?  Me ha causado horas  y horas de placer. 

"Jarocha, sotaventina, 
mestiza, criolla, mulata, 
tu bamboleo me desata, 
como tormenta marina
 y mi trova repentina 
le canta al bendito dios
 que me prestó a mi la voz,
 que te dio a ti el sentimiento
que nos regaló el momento, 
para mirarnos los dos"

Y ¿qué decir de ese acto de la creación que pareciera que nos toma por sorpresa y nos hace escribir palabras que no pensábamos combinar? 

"Poesía, verdad, poema mío,
fuerza de amor que halló tus manos, lejos,
en un vuelo de junio pulió espejos
y halló en la luz la palidez, el frío.

Yo rebosé los cántaros del río,
paré la luz en los remansos viejos,
di órdenes a todos los reflejos;
Junio perfecto dio su poderío.

Poesía, verdad de todo sueño,
nunca he sido de ti más corto dueño
que en este amor en cuyas nubes muero.

Huye de mí, conviérteme en tu olvido,
en el tiempo imposible, en el primero
de todos los recuerdos del olvido."
(Carlos Pellicer Cámara)

Sí, ese momento cuando estamos al borde de un sentimiento que nos prende, que nos hace perder la noción del tiempo y quizá de la vida misma; ese momento en que un flujo inanimado de palabras fluyen por nuestra mano y rellenan el papel  forjando un mar de historias y sonidos. Ese momento en que quizá encontramos calma y dicha de saber que tenemos capacidad de decir lo que está dentro, que finalmente hemos encontrado coherencia entre lo que sale y lo que nace, aunque esa coherencia sea sólo nuestra, aunque seamos locos, errantes.

Aunque seamos destellos de luz perdidos en el desierto que aún no conocemos, piedras coloridas que ruedan para marcarle el camino a un gnomo, una canción que asombra al mundo, un instante de paz que va y viene como el mar que disfruta la tormenta y luego la vomita, un signo en el cielo que le arranca el beso al amante, una flor, un grito, la nada...


Aunque seamos las pizcas de un gigante que cocina la pasta, esa pasta que será poesía.






6.9.13

Der Traum

"Im schönsten Garten wallten
Zwei Buhlen Hand in Hand,
Zwo bleiche kranke Gestalten,
Sie sassen in's Blumenland.

Sie küßten sich auf die Wangen,
Sie küßten sich auf den Mund,
Sie hielten sich fest umfangen,
Sie wurden jung und gesund.

Zwei Glöcklein klangen helle,
Der Traum entschwand zur Stund';
Sie lag in der Klosterzelle,
Er fern in Thurmes Grund".

"Por el más hermoso de los jardines paseaban
dos amantes tomados de la mano:
dos pálidas imágenes enfermizas,
sentadas en el país de las flores.

Se besaban en las mejillas,
se besaban en la boca,
se abrazaban estrechamente,
se convertían en seres fuertes y sanos.

Dos campanitas sonaron claramente,
el sueño desapareció en ese instante;
ella estaba en la celda del convento,
él, lejos, en la torre del castillo".

13.5.13

Historia de una calabaza

Era una calabaza regordeta y brillante.
Así ella toda linda y yo que me la como.

8.5.13

La cruz en la montaña


Una cruz consiste en dos líneas rectas que se cruzan en ángulo recto, sin embargo no es propiamente la definición lo que nos explica la tipología, la cruz se ha convertido en un símbolo que dice más que la palabra misma, surge de un sincretismo histórico y es propio de la pasión de Cristo, de la muerte, de la victoria al llegar a la cima de una montaña, de la esperanza, de la devoción, del rezo y la petición, del festejo y demás acepciones propias del uso de la cruz en México. Cabe hacer notar que si nos remitimos al origen de la cruz, no es un símbolo meramente cristiano, aunque fue legado como tal en nuestro país. 


 Cruz en la cima del volcán Ajusco, en el Pico del Águila.



Cruz en la cima del volcán Iztaccíhuatl.

 Junto a esta cruz existen otras en esta cima, que no solo remiten a la conquista de la cima o a algún montañista caído, sino también a gente que ha tenido como última voluntad  su nombre en una cruz en las alturas de esas nieves. 
Este tema conlleva a la reflexión y decisión de parte de los montañistas puesto que se ha generado la libertad de colocar cruces en las montañas trayendo como consecuencia una contaminación visual al paisaje y un choque ideológico con aquellos que buscan una cima por el símbolo puro de la montaña sin atavíos ni creencias religiosas.

Cruces en el volcán Chichón.

Caminando rumbo al volcán Chichón, se encuentran estas tres cruces que año con año son dejadas ahí como muestra de una devoción que se mezcla con ceniza y sol. La gente de pueblos como Chapultenango y la colonia "El volcán" hacen una carrera anual hacia la Basílica de Guadalupe; corren por relevos más de 700 km llevando cruces y estandartes como símbolos. 

Cruz en la cima del Pico de Orizaba o Citlaltepetl.



Estos son solo algunos ejemplos de las cruces en las montañas de México, el tema puede ser retomado y reflexionado desde diversos puntos de vista. Quedo en espera de comentarios para el enriquecimiento de todos.


20.3.13

Retomando el blog

Hoy decido retomar el blog, así, sin mas pretensión.


27.12.11

Un ciempiés y yo.

Empezó a amarrarse los zapatos y yo me fuí.

26.12.11

Encuentro con un mounstruo

Iba yo así tranquila caminando cuando de repente...
Lo ví, me vió.
Corrí, corrió.

10.12.11

Es solo una idea.
Lo más difícil que he tenido que hacer en la vida es luchar contra una idea.
No es muy grande, solo es fuerte en mí.

Pero es ajena, no soy yo una idea.

25.5.11

El Guillatun

Millelche está triste con el temporal
los trigos se acuestan en ese barrial
los indios resuelven después de llorar
hablar con Isidro, con Dios y San Juan,
con Dios y San Juan
con Dios y San Juan.
Camina la machi para el guillatún
chamal y revoso, trailonco y cultrúm,
y hasta los enfermos de su machitún
aumentan las filas de aquel guillatún.
La lluvia que cae y vuelve a caer
los indios la miran sin hallar qué hacer
se arrancan el pelo, se rompen los pies,
porque las cosechas se van a perder,
se van perder.
Se juntan los indios en una corralón
con los instrumentos rompió una canción,
la machi repite la palabra sol
y el eco del campo le sube la voz, le sube la voz.
El rey de los cielos muy bien escuchó
remonta los vientos para otra región,
deshizo las nubes, después se acostó,
Los indios la cubren con una oración,
con una oración.
Arriba está el cielo brillante de azul,
abajo la tribu al son del cultrúm
le ofrece del trigo su primer almud
por boca de una ave llamada avestruz,
llamada avestruz.
Se siente el perfume de carne y muday
canelo, naranjo, corteza e' quillay,
termina la fiesta con el aclarar,
guardaron el canto, el baile y el pan.


31.10.10

Retrato de otro instante

amarillo. Un confuso y denso instante amarillo. No lo percibo en todo el cuerpo, solo en el cuello y en esa zona sensible que te siente.
No imagino, pierdo la fantasía de mi cuento. No recuerdo la magia. No acepto la coherencia. Escribo en un dialecto.
Parece que una flor se va enredando, que la vida la toma por sorpresa.
Parece que la noche va invadiendo, que el color huye de tristeza.

No es en todas partes, pasa solo donde estoy ausente, donde busco y no me encuentro. Pasa donde olvido el sauce y el viento.
Invado otro instante. Recuerdo que no entiendo, que lloro. Que lucho descontroladamente y muero. Recuerdo que ya viví lo que vivo; recuerdo que el ciclo del fuego se repite. Que no soy la brisa que fluye con el agua; que no soy sino lo que soy. Que soy color y forma; aveces sin fondo, aveces sin sueños. Que soy luz y una profunda zanja que termina en otra estrella.

Que soy la amorfo que no entiendo y el olor de aquella noche perdida.
Que soy la arena y la roca del negro en los ojos de tu sueño.
Que soy la canción y el silencio en el sonido de un nacimiento.

Recuerdo que no recuerdo. Recuerdo que estallo, que todo gira y el mundo se desvanece con mis dudas. Recuerdo que soy nada y todo. Que soy el espacio entre lo bueno y lo perverso; que soy el anhelo entre lo activo y lo pasivo. Que olvido el amor en mis recuerdos.
Olvido el amor en mis recuerdos...
Olvido el amor en mis recuerdos...
Olvido el amor.

Retrato de un instante

Tu silencio y la razón desaparecen la flor de colores que va volando.
Un poema en lengua extraña que va retacando mis miedos. Los miedos que aprisionan.
Un instante en que quiero palabras y obtengo silencio; un instante que quiero caricias y obtengo un verde oscuro, denso. El color y el misterio inundan la duda que cavo en este instante.

La luz rellena el pensamiento que he perdido en el bosque; me ilumina y no lo entiendo. No recuerdo lo que viví hace mil años, no siento, olvido.
Recuerdos de la luna que ilumina mi plegaria; recuerdos de un grillo que canta.
Recuerdos de la verdad que no conozco, de la diosa, del azul y de una estrella.
El cero en mi cabeza, un lugar que no tiene espacio y el aroma de tu rostro.

Duda

No entiendo aquello que hay que entender.
No pienso cuando debo de pensar.
No conozco todo lo que hay en mí.

10.9.10

Petralía

Solo un instante de otros lares.

Estuve ahí y todo estaba en movimiento. Estoy aquí y todo está en movimiento.
Ese lugar existe y este lugar existe.

¿ y yo?

8.9.10

No lo sé

No lo sé..
Ignoro la realidad y el exceso.

Aveces quiero más. Y otras veces menos.

21.8.10

Pupi

Una tradición que te ilumina el día.
El sábado en la tarde comíamos tranquilamente un helado en Monreale; de pronto me dí cuenta que nos daba tiempo de hacer un sueño realidad. Esto no es algo ordinario, podía ser un día todavía más especial. Comenzamos a correr para la función de Pupi, en el Teatro Argento.
El Teatro Argento se encuentra en un callejoncito tranquilo y solitario frente a la magna Catedral de Palermo.


Apenas entramos comenzó la diversión y la algarabía.

Todo era música y colores. Yo estaba extasiada con la historia; las marionetas parecen reales, cantan, bailan, pelean con dragones, se enamoran y son felices.


El asombro vino a mí.


El cuento terminó después de mil batallas; la princesa sonreía y la gente le aplaudía. El dragón, que con tanta gracia se movía, había podido sobrellevar la batalla con el mejor espadachín y ahora revivía con los aplausos que función tras función lo han alimentado.

Los aplausos terminaron en el Teatro pero la emoción viajo con todos. Hace un par de meses tuve un deseo. Ese día, en aquel rincón del mundo, se cumplió.

Contrastes

Azul

es lo que danzo y verde lo que canto..
Mi vida brilla desde que te amo tanto.