Un yucateco en el Ajusco

Muy temprano comenzó la excursión al Ajusco. Cristóbal llegó al departamento en la del Valle mientras yo comenzaba a despertar. Inmediatamente después llegaron Hugo y Eric por nosotros y partimos juntos rumbo al punto de reaunión con los demás. Se retrasó la salida casi una hora, lo que propició las bromas y la confianza inicial, el yucateco no lo hizo esperar y se presentó con una bomba.

Comenzó la subida entre pasos largos, pasos cortos,calor, frío,risas, emoción.Cada quien encontró algo de sí mismo antes de encontrar la cima. Una vez más el G-10 aprendió en la montaña.
Fuímos muchos: Eric, Javier, Anahí, Adriana, Jero,Lizardo,Hugo, Saenger,Héctor,Daniel, Bismarck, Rodrigo y su novia, Serena, Santiago, Cristóbal y yo.
Entre amigos y nuevos conocidos tuvimos un domingo lleno de risas y de asombros.Y ese puesto de quesadillas que nos resulta la gloria al bajar del Pico de Águila no podía faltar; una vez más no les salió la cuenta y no trajeron todas las quesadillas que pedimos, pero esa deliciosa sopa de hongos con queso derretido y el obligado descuento al gran grupo de montañistas nos obligan a regresar ahí, jaja.




¡Felicidades a Lizardo! Esa segunda pared fué un gran logro para mi estimado yucateco.Todos logran una cima personal al estar en una montaña y siento que Lic logró una gran cima.




pd.Supongo que no soy un cronopio, pero aveces me siento tan verde.